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Ramón de Campoamor

Se dedicó a la política (gobernador de Valencia, diputado) con ideas conservadoras, siendo enemigo de la democracia, del sufragio universal y de la intervención del pueblo en el gobierno. Era un hombre poco dado a la ostentación y prefería su vida hogareña con su mujer antes que cualquier lujo.
Su estilo era prosaico intencionalmente, pues pretendía bajar el tono de la poesía y acercarla a la prosa así como elevar la prosa. Buscaba una expresión natural sin caer en lo vulgar, afirmando que la poesía debía valerse de las palabras de la lengua de todos y que cualquier tema puede ser poético. Así, desterró de la poesía el lenguaje supuestamente poético que habían utilizado neoclásicos y románticos. Esto no tiene apenas precedentes en la poesía española.
Gozó de general estimación como poeta. Rubén Darío lo visitó y le dedicó una décima pero precisamente el movimiento modernista fue el que derrotó el realismo antirromántico de Campoamor.. Influyó también en Machado y sus poemillas parecen anticipo de Greguerías. Actualmente estamos ante un momento semejante al que provocó la reacción del poeta, se está volviendo al realismo en poesía y poetas como Blas de Otero buscan lo que ya buscó Campoamor: que la poesía descienda al pueblo para que deje de ser algo de minorías.
Quizá no ha sido suficientemente valorado porque su problema es la redundancia, que hace que rasgos como el humor pierdan efecto. Este exceso debilita su obra y provoca que el lector se tome a broma las ideas expresadas.
Reunió sus teorías estéticas en Poética, en la que sostenía las siguientes ideas:
1.      Autonomía del arte, pero apostando por un arte trascendental. La poesía se valora a través de la forma, no de sus ideas.
2.      Supremacía de la poesía sobre la prosa, ya que el verso exige una capacidad intelectual mayor.
3.      La poesía debe reflejar problemas de su época y no perderse en evocaciones melancólicas del pasado o sueños del porvenir.
4.      La poesía debe huir de la abstracción: los sentimientos deben transformarse en objetos y hechos. El arte debe hacer perceptible las ideas abstractas
Sus obras más importantes son:
  • Fábulas: no siguen las formas tradicionales de este género sino que consisten en observaciones sobre casos o circunstancias de la vida y no tampoco toman el título de los animales que intervienen, sino del propósito que persiguen. Tienen rasgos en común con las Doloras.

  • Doloras: escribió 223 de las composiciones que suponen el núcleo de su obra. En ellas se une el sentimiento con la filosofía y pretende dejar constancia de amargos descubrimientos de las experiencias, no proponiendo remedio, sino con el fin de mostrarnos la vida. Si se rebajan a aforismos se convierten en Humoradas; si se amplían hasta relato dan lugar a los Pequeños poemas. Su recurso favorito en estas obras en es el contraste, pues la acción se sintetiza en una antítesis final. Anticiparon el tono de las Rimas "del desengaño" de Bécquer.

  • Pequeños poemas: afirmaba no haberlos llamado "poemitas" porque el diminutivo les daría un matiz que no tenían, pues eran pequeños solo por la extensión pero no por la importancia, ya que pretendía hacer gran poesía en pequeño espacio. Tienen intención filosófica y entre ellos destaca El tren expreso.

  • Humoradas: composiciones muy breves (a veces, un pareado).

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