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El realismo mágico y lo real maravilloso


El Realismo Mágico

En el Realismo Mágico se muestra la realidad narrativa con elementos fantásticos y fabulosos, con la intención de exagerar la aparente contrariedad existente entre los mismos. La estrategia del escritor consiste en sugerir un clima sobrenatural sin apartarse de la naturaleza y su táctica es deformar la realidad. Los personajes, las situaciones, los acontecimientos y escenarios son reconocibles y razonables, pero el narrador juega con ellos, ya que se propone provocar sentimientos de extrañeza.
Lo maravilloso es lo natural. Evita cualquier efecto emotivo de escalofrío, miedo o terror, provocado por un acontecimiento insólito. Lo extraordinario deja de ser lo desconocido para incorporarse a lo real, la maravilla es la realidad. El realismo surge como una alteración privilegiada de la realidad. En síntesis, el Realismo Mágico no pretende presentar la magia como si fuera real, sino presentar la realidad como si fuera mágica.
Aunque François Rabelais, Laurence Sterne, Vladimir Nabokov y Günter Grass ya manifestaron estas tendencias en sus obras, el Realismo Mágico floreció en la literatura latinoamericana de 1960 y 1970, en un momento en que el esplendor de las dictaduras políticas convirtió la palabra en una herramienta preciada y manipulable.
Los representantes máximos son: Miguel Ángel Asturias, Carlos Fuentes, Julio Cortázar, Mario Vargas Llosa y, sobre todo, Gabriel García Márquez.

Lo real maravilloso
Alejo Carpentier formuló la siguiente pregunta en el prólogo de su novela "El reino de este mundo", publicada en 1949: ¿Qué es la historia de América Latina sino una crónica de lo maravilloso en lo real? Esta pregunta lo convirtió en el padre de lo Real Maravilloso.
Lo Real Maravilloso es un movimiento latinoamericano que muestra nuestra cultura, las creencias de los indios, con drama y fantasía, que se une para dar un contexto muy original e irreal para otras culturas. Es la narración de aquellos hechos que escapan a lo estrictamente racional y se instalan en nuestro quehacer cotidiano, haciendo natural lo que para otras culturas sería mágico, sobrenatural o inverosímil.

Diferencia entre lo Real Maravilloso y el Realismo Mágico

El Realismo Mágico
Es una tendencia internacional que surge hacia 1918 y que se da tanto en la pintura como en la literatura. Franz Roh distinguió algunos rasgos sobre las diferencias entre el expresionismo y el postexpresionismo Realismo Mágico en la pintura, aplicables también a la literatura. La primera manifestación del Realismo Mágico en un cuento ocurrió en 1920 con "El hombre muerto", de Horacio Quiroga. Pero la tendencia llegó a su auge con algunos cuentos de Borges y con "Cien años de soledad", de García Márquez.
El Realismo Mágico se plasma en un mundo totalmente realista, en el cual de repente sucede algo fantástico. Por ejemplo, en "El hombre muerto", de Quiroga, un colono acostumbrado a luchar contra la naturaleza se cae sobre su machete cruzando la cerca de alambre de púa. El detalle mágico realista es que mientras agoniza, no siente absolutamente nada de dolor y no se ve ni una gota de sangre y la naturaleza queda totalmente tranquila.
El Realismo Mágico se distingue por su prosa clara y precisa.

Lo Real Maravilloso
No es una tendencia internacional. Proviene de las raíces culturales de ciertas zonas de la América Latina, raíces indígenas y africanas que pueden manifestarse tanto en la literatura colonial como en las novelas de Alejo Carpentier y de Miguel Ángel Asturias.
La prosa de lo Real Maravilloso se caracteriza por un barroquismo, una prosa recargada de adornos. Para el autor de lo Real Maravilloso, sus personajes indígenas o negros de Guatemala, Cuba o el Brasil, creen en los aspectos mitológicos o espirituales de su cultura.

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